Ella ha optado por hacerlo.Esta chica no es una cualquiera, es una esclava en entrenamiento.Mira cómo ha atravesado sus ritmos, su cuerpo cubierto de marcas de humillación mientras lucha por complacer a su amo.Pero a pesar de todo, encuentra la fuerza para continuar, sus manos siempre encontrando la manera de darse placer a sí misma.