Mi esposa, entusiasta del fitness, frecuenta el gimnasio con nuestro mejor amigo.En una visita rutinaria lo pilló mirándole el culo.Indignada, lo desafió a un encuentro caliente, dejándome fuera.Su aventura ilícita se desplegó en varias posiciones, culminando en un final desordenado en su criado ya rojo-caliente.